Andemos es la iniciativa internacional de voluntariado y pasantías de Paz y Esperanza Internacional, diseñada para promover el intercambio cultural y el aprendizaje mutuo entre personas de diferentes contextos. A través de este programa, nos dedicamos a servir, aprender y buscar justicia en comunidades marginadas de Perú, Bolivia, Ecuador, Chile, Colombia y Brasil.
Andemos Latino es un programa creado por Andemos para que los latinoamericanos puedan vivir una experiencia de intercambio cultural y voluntariado en las oficinas de Paz y Esperanza en Perú, Bolivia, Ecuador, Chile, Colombia y Brasil. La oportunidad de un intercambio de experiencias y conocimientos enriquecerá tanto tu vida personal como tu visión del país nativo. Si eres latino y deseas conocer y participar en el trabajo que Paz y Esperanza está realizando en alguno de estos países, déjanos tus datos y emprende esta aventura.
Fomentamos el voluntariado para personas con un corazón dispuesto a construir paz a través de sus dones, talentos y conocimientos, poniéndolos al servicio de los proyectos de nuestras oficinas locales. Estos proyectos impactan positivamente a comunidades vulnerables en Perú, Bolivia, Ecuador, Chile, Colombia y Brasil, donde Paz y Esperanza trabaja. Nuestra meta es unir a voluntarios y líderes locales para crear un cambio duradero.
¡Únete y sé parte de esta transformación!
Andemos trabaja de la mano de las oficinas locales y surge para acompañar a personas con un corazón dispuesto a servir en comunidades vulnerables, poniendo sus conocimientos profesionales al servicio de estas intervenciones. Así es como Andemos abre las puertas para que pasantes de diferentes países, universidades e intereses profesionales se sumen a esta construcción en Latinoamérica.
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¡Empaca tus maletas y
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maravilloso para
aprender y servir
a otros!
"Mi experiencia con Andemos significó que pude no solo formar relaciones fuera de los Estados Unidos que no habrían existido sin la facilitación de la organización, sino también comprometerme con la misión de Andemos de caminar lado a lado con las comunidades a las que sirven. Pude aprender, recopilar y preservar historias, y trabajar con empleados de Paz y Esperanza apasionados en su misión de eliminar la violencia y la injusticia".
Luchar por la justicia en un país donde está distorsionada y los roles de género opresivos se han normalizado, hace de Paz y Esperanza un faro de luz necesario. Me siento inspirada y conmovida por que el equipo legal y psicológico de Bolivia invierte su tiempo y sus emociones a hacer esto posible. Me siento agradecida cada vez que entro a la oficina de Paz y Esperanza, y estoy emocionada por haber sido voluntaria y aprender tanto del equipo.
Trabajar con Paz y Esperanza fue transformador. Presenciar cómo PYE acompaña y sirve a las comunidades mediante relaciones intencionales y participación comunitaria me mostró cómo una organización puede comprometerse a apoyar a los más necesitados. Me impactó trabajar con mujeres desplazadas por conflictos armados y ver cómo el equipo de PyE les proporcionaba un espacio único a través de proyectos de arte y construcción de relaciones.
Durante mi último semestre de derecho, ser voluntaria con Paz y Esperanza en Lima, Perú, fue transformador. Sumergirme en una nueva cultura y recorrer pueblos remotos me permitió apreciar la resiliencia de las personas. Ayudar mientras mejoraba mi español fue gratificante. La experiencia me expuso al sistema legal peruano y problemas de justicia y derechos humanos, alimentando mi pasión por la justicia social.
"Mi experiencia con Andemos significó que pude no solo formar relaciones fuera de los Estados Unidos que no habrían existido sin la facilitación de la organización, sino también comprometerme con la misión de Andemos de caminar lado a lado con las comunidades a las que sirven. Pude aprender, recopilar y preservar historias, y trabajar con empleados de Paz y Esperanza apasionados en su misión de eliminar la violencia y la injusticia".
Luchar por la justicia en un país donde está distorsionada y los roles de género opresivos se han normalizado, hace de Paz y Esperanza un faro de luz necesario. Me siento inspirada y conmovida por que el equipo legal y psicológico de Bolivia invierte su tiempo y sus emociones a hacer esto posible. Me siento agradecida cada vez que entro a la oficina de Paz y Esperanza, y estoy emocionada por haber sido voluntaria y aprender tanto del equipo.
Trabajar con Paz y Esperanza fue transformador. Presenciar cómo PYE acompaña y sirve a las comunidades mediante relaciones intencionales y participación comunitaria me mostró cómo una organización puede comprometerse a apoyar a los más necesitados. Me impactó trabajar con mujeres desplazadas por conflictos armados y ver cómo el equipo de PyE les proporcionaba un espacio único a través de proyectos de arte y construcción de relaciones.
Durante mi último semestre de derecho, ser voluntaria con Paz y Esperanza en Lima, Perú, fue transformador. Sumergirme en una nueva cultura y recorrer pueblos remotos me permitió apreciar la resiliencia de las personas. Ayudar mientras mejoraba mi español fue gratificante. La experiencia me expuso al sistema legal peruano y problemas de justicia y derechos humanos, alimentando mi pasión por la justicia social.
Nuestra oficina en Guayaquil, fue fundada en el año 2012 Ecuador, trabaja en áreas periféricas de bajos recursos, creando redes para la protección, el tratamiento y la denuncia de abusos, así como el empoderamiento comunitario y la promoción para mejorar los sistemas de justicia y el acceso a la curación de las víctimas de la violencia. A través de talleres preventivos, inspiramos a las personas a una vida alejada de la violencia. A través de la atención terapéutica, brindamos restauración y crecimiento a las víctimas que necesitan procesar su trauma.
Cuna de Paz y Esperanza. Perú cuenta con 4 oficinas(Lima, San Martin, Andahuaylas, Huánuco) que ponen de manifiesto la diversidad del país y el trabajo que aún queda por hacer. Entre la sierra, el desierto, la selva y los valles altos estamos trabajando en temas de derechos territoriales dentro de territorios indígenas, justicia climática, acceso para personas en situación de discapacidad, educación bilingüe, educación para estudiantes sordos, prevención y acompañamiento en casos de violencia, etc.
Esta oficina fue fundada en el año 2017 justo después de la firma del tratado de paz entre los grupos armados y el gobierno, la oficina en Colombia se centra en acompañar el proceso de paz en Colombia. Trabajando en comunidades de desplazados, así como en las comunidades de donde muchos fueron desplazados, el trabajo se centra en la construcción de la paz y el acompañamiento a las comunidades utilizando el arte, el deporte, la fe y los grupos comunitarios.
Esta oficina abrió sus puertas en el año 2012. Trabajando desde hace más de una década en las tierras bajas de Santa Cruz, Bolivia, Paz y Esperanza trabaja en temas de prevención y atención a casos de violencia. En un país donde 8 de cada 10 mujeres sufren algún tipo de abuso. Nos centramos en la educación y en el acompañamiento de los casos a través del sistema judicial para buscar justicia.
Cuna de Paz y Esperanza. Perú cuenta con 4 oficinas (Lima, San Martin, Andahuaylas, Huánuco) que ponen de manifiesto la diversidad del país y el trabajo que aún queda por hacer. Entre la sierra, el desierto, la selva y los valles altos estamos trabajando en temas de derechos territoriales dentro de territorios indígenas, justicia climática, acceso para personas en situación de discapacidad, educación bilingüe, educación para estudiantes sordos, prevención y acompañamiento en casos de violencia, etc.
Nuestra oficina en Guayaquil, fue fundada en el año 2012 Ecuador, trabaja en áreas periféricas de bajos recursos, creando redes para la protección, el tratamiento y la denuncia de abusos, así como el empoderamiento comunitario y la promoción para mejorar los sistemas de justicia y el acceso a la curación de las víctimas de la violencia. A través de talleres preventivos, inspiramos a las personas a una vida alejada de la violencia. A través de la atención terapéutica, brindamos restauración y crecimiento a las víctimas que necesitan procesar su trauma.
Esta oficina fue fundada en el año 2017 justo después de la firma del tratado de paz entre los grupos armados y el gobierno, la oficina en Colombia se centra en acompañar el proceso de paz en Colombia. Trabajando en comunidades de desplazados, así como en las comunidades de donde muchos fueron desplazados, el trabajo se centra en la construcción de la paz y el acompañamiento a las comunidades utilizando el arte, el deporte, la fe y los grupos comunitarios.
Esta oficina abrió sus puertas en el año 2012. Trabajando desde hace más de una década en las tierras bajas de Santa Cruz, Bolivia, Paz y Esperanza trabaja en temas de prevención y atención a casos de violencia. En un país donde 8 de cada 10 mujeres sufren algún tipo de abuso. Nos centramos en la educación y en el acompañamiento de los casos a través del sistema judicial para buscar justicia.
¿Estás interesado en saber más sobre cómo puedes ser voluntario en nuestras oficinas de América Latina?
Me encantaría ponerme en contacto contigo y conocerte mejor para que podamos encontrar el espacio perfecto para ti. Envíame un mensaje y me comunicaré contigo:
Ann Jennings-Grisham
Directora de Andemos y coordinadora de voluntarios.